Espectros
Temblando lentamente, la figura levantó los párpados;
unos ojos oscuros y penetrantes se fijaron en mí,
y en el mismo instante, sus labios se pegaron a los míos,
cálidos, húmedos, oliendo a sangre...
unos brazos suaves se cerraron alrededor de mi cuello
y un corazón ardiente, palpitante,
se apretó convulsivamente al mío.
Comentarios