.


Estoy para darme algo, puedo notar cómo me bambolea la sangre, cómo aturde mis oídos y no me deja casi respirar ; tengo las manos frias y torpes y la sensación de que lo único que puedo hacer es balancearme hacia delante y hacia atrás, pero nada de eso logra calmarme.

No me había dado cuenta de lo seca que tengo la boca hasta que ha empezado a dolerme y hay un maldito nudo en mi garganta que me asfixia.

Sospecho que podría asar un buen chuletón con el calor que desprenden mis mejillas y todo lo que era un juego divertido ha perdido de súbito toda la gracia.

Me siento estúpida, perdida y desorientada.

Todos los pensamientos, los planes que se agolpaban en mi cabeza han cesado de pronto; sólo puedo encontrar un enorme vacío, vaco y frío.

Y ni siquiera puedo sentirme triste, ni feliz, ni entusiasmada, ni excitada ni ansiosa… sólo un nervioso vacío, un puto pánico que me atenaza, joder.

Comentarios

Entradas populares de este blog

So you want to be a writer...

Mi dieta particular