Aunque no podemos adivinar el tiempo que sera, si que tenemos, al menos, el derecho de imaginar el que queremos que sea. Naciones Unidas han proclamado extensas listas de Derechos Humanos; pero la inmensa mayoria de la humanidad no tiene mas que el derecho de ver, oir y callar. ¿Que tal si empezamos a ejercer el jamas proclamado derecho de soñar? ¿Que tal si deliramos, por un ratito? Al fin del milenio vamos a clavar los ojos mas alla de la infamia, para adivinar otro mundo posible: el aire estara limpio de todo veneno que no venga de los miedos humanos ni de las humanas pasiones; la gente no sera manejada por el automovil, ni sera programada por la computadora, ni sera comprada por el supermercado, ni sera mirada por el televisor; el televisor dejara de ser el miembro mas importante de la familia, la gente trabajara para vivir, en lugar de vivir para trabajar; se incorporara a los codigos penales el delito de estupidez, que cometen quienes viven por tener o por ganar, en v...